Being Human vs Being Human
26 enero, 2011 Deja un comentario
Continuamos con el repaso que inicié el lunes con Skins, la segunda adaptación que los americanos de una serie británica de éxito estrenada esta semana ha sido Being Human. En primer lugar, hay que explicar que la serie original es un producto de lo más particular. Es una serie de autor con todo lo bueno y lo malo que tiene esta afirmación.
El Being Human inglés emitido por el tercer canal de la BBC (BBC Three) que normalmente se dedica a estos productos minoritarios, narra la vida de un vampiro, un hombre lobo y una fantasma que viven juntos. El argumento puede parecer de lo más marciano y la serie es de lo más marciano, pero muy divertida. El tono va desde la comedia negra y de gag puro al terror más Buffy Cazavampiros… En esto se nota la mano del autor, Toby Whithouse que es actor-comediante además de guionista. Whithouse se ha convertido en un experto en estos productos tras haber participado tanto en Doctor Who como en Torchwood, el spin-off de la primera y ésta es su primera aventura como creador… eso también se nota.
Y es que una serie de autor puede aportar muchas cosas: Personajes interesantes (los tiene), distintos a lo que solemos ver (alguna que otra cosa nueva se ve, pero son bastante clásicos) y tramas fuera de lo común o con un tratamiento distinto (en esto si que destaca)… pero también, tiene el problema de que el producto se imbuye totalmente en el universo personal del autor y si este no está del todo definido… la serie empieza a dar tumbos. Este es uno de los principales problemas de la serie, muchas veces da la sensación de improvisación continua y de falta de un destino.
No es el único, ya que una realización poco vistosa y muchas veces torpe, seguramente debido a la ausencia de dinero y tiempo para mejorarla, y unas localizaciones que hacen que la historia pierda parte de la credibilidad que toda serie de este tipo necesita para no convertirse en una parodia. Eso sí, a pesar de sus fallos el Being Human de Whithouse es un producto totalmente disfrutable, muy divertido y original.
El éxito de adaptar
Syfy, la cadena de cable que ha llevado a cabo la ADAPTACIÓN (lo pongo en mayúsculas para resaltar la importancia del sustantivo y que no pone de la copia), ha sabido ver las taras de la serie y aunque Tobey Whithouse está en el proyecto ya no es el único guionista de la serie. Además, por una vez parece que han aprovechado la segunda oportunidad y han mejorado el producto.
El principal cambio es el tono. Ya no es una dramedia, aunque tenga algún momento de humor… Es un drama fantástico (de fantasía) y terror. Esto se nota desde el casting, donde el hombre lobo deja se mitad desahogo cómico, mitad personaje, para convertirse en personaje a tiempo completo. La construcción del vampiro, llamado Aidan en la nueva versión en honor del actor que lo interpretó en la original, y el fantasma son bastante parecidas por lo que hemos podido ver por el momento.
El casting no mejora ni empeora la serie… La transforma. La ausencia del carismático vampiro interpretado por Aidan Turner (lo mejor para mi de la serie original) es sustituido por un más contenido Sam Witwer… El tema del hombre lobo ya lo trate antes… y la fantasma mantiene ese encanto de dulce chica border-line.
Otro elemento muy destacable es el trabajo de producción (se ve que hay más dinero) que hace el mundo de Being Human más realista, más cercano… y transforma un Bristol de cartón en un Bostón de carne y hueso. Las localizaciones están más acorde con el relato y por primera vez, en el universo Whithouse, la sociedad vampírica no da risa y si un poco de respeto.
Por último, cabe destacar el trabajo de dirección de Adam Kane, co-productor ejecutivo y director del piloto y algún capítulo de la serie. Las líneas maestras de la narración audiovisual da profundidad a la serie y el uso de la música, muy destacable también en la original, cierra un producto de lo más recomendable. Su experiencia como director y operador de cámara en series como Héroes, Anatomía de Grey o Criando Malvas y su cargo de responsabilidad en la serie es una muestra de que Syfy le ha dado más importancia a este aspecto y se agradece.
Resumiendo, por una vez han sabido aprovechar la oportunidad para corregir errores y a pesar de conocer (en mi caso) la historia original el piloto es muy entretenido y los cambios argumentales, de producción y lo acertado del casting hace que te olvides de que estás viendo un remake y dejes de comparar. La segunda adaptación de Being Human (la primera la realizó hace un año la cadena canadiense de cable SPACE (Si, acabaré viéndola) es un ente que parece que quiere independizarse rápidamente de su progenitora y convertise a su vez en una serie de obligado visionado, ya no sólo para los fans del género.